31 octubre 2010

BRC

Siempre tuve algo para extrañar. Toda mi vida siempre extrañe a alguien o a algo. Sea lo que sea: una persona, una comida, un lugar, un sonido, un olor, una voz. Siempre.
Todos tenemos la necesidad de extrañar un poco, ¿no?. Son lindos los reencuentros con eso que extrañaste, por el simple hecho de que extrañar alimenta las ganas de volver a eso. Es la pura verdad. Mas te extraño, mas te quiero ver, mas te quiero.
Pero, ¿que pasa cuando uno extraña algo que sabe que nunca va a volver a vivir? ¿Como se hace para dejar de extrañar eso que te paso solo una vez en la vida? ¿Se hace extrañando para toda la vida? ¿Eso que ahora extraño va a empezar a desaparecer poco a poco hasta aceptarlo?
Extraño, en este momento, el aire seco. Levantarme y respirar aire puro. Mirar por la ventana y ver nada mas y nada menos lo que cualquiera podría tener como cuadro en su casa. No dormir. No estar en la PC. Escuchar la guitarra y cantar a las 6 de la mañana. Ver el amanecer entre montañas. Correr de acá para allá. El viteltone. Que me despierten a las patadas. "Comercio, Inchausty, a comeeeeeeeeeer". Estar todo el tiempo con amigos. Ir a los boliches mas grandes. Asombrarme por todo. Ver caras nuevas y que parezcan tan viejas como la mía. Chistes malos. Ese tema que no olvidaremos nunca. Una ronda, 20 chicos, corazones en alto y una lagrima que llega hasta el piso. Arde la ciudad, chino, no me arrepiento, solo aquí. TODO, TODO, TODO.
BARILOCHE, FUISTE LO MEJOR.

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